Lupe Sino
La torpe e inútil película sobre Manolete, que acaba de estrenarse, después de no se que barullos, se abre, al parecer, con una secuencia en la que el diestro, al levantarse de la cama , mira al espejo donde Lupe Sino ha escrito: " follas como un niño " , luego sel torero se mete una raya de cocaína. !Maldito sea el dinero y el mal gusto que permite resumir de esta manera a un hombre en el último año de su vida !. Hay un foto de Manolete ,que tengo ahora mismo enfrente de mí , tomada en la plaza de Bogota en ese último año, que vale por toda la puta cinta. A los efectos.
Fernando González Viñas, que publicó el año pasado el mejor trabajo que se conoce sobre el asunto ( " Biografía de un sin vivir " . Ed Almuzara ) da en cubierta la foto a la que me refiero y cuenta una de las grandes anécdotas taurinas para hacerse una idea de lo que estamos hablando. Convoca a José Dámaso Rodríguez, un familiar de Manolete, muerto en el año de 1862:
" Pepete murió corneado por Jocinero un Miura que mató siete caballos, tomó dieciseis varas y corneó a Pepete en el corazón. Aún así, Pepete llegó todavía con fuerza a la enfermería y le dijo al doctor González que le atendía : ¿ Es argo ? ".
Manolete fue un tio , un cabal , un hombre de respeto, un referente moral en una época no precisamente sobrada, un torero; un ser traspasado por la tragedía igual que un coy que se arroja al mar cosido con el cadaver del marinero dentro. Fue un hombre que se puso siempre allí donde se le esperaba. En casa de mi abuelo Julio se guardaba luto cada 28 de agosto. No se oía ni el parte de Radio Nacional de España. Un ser de esta categoría no se merecía la película que acabo de no ver en medio del bochorno.
Manolete se enamoró de Lupe Sino ( Antonia Bronchales Lopecino ,! que importante que una mujer se llame Antonia ! ) y ella de él como es de ley que suceda en estos casos. Debió ser un amor tormentosos y difícil que tiraba de Manuel hacia la vida y le desviaba de su objetivo mas querido que no era otro que morir en la plaza. Encontró su destino una tarde ciega, en Linares, llena de moscas y alboroto. González cuenta que Lupe Sino estuvo en Córdoba para el entierro pero qué como nadie la quería , y no tenía sitio , estuvo vagando de incógnito por las calles y plazas hasta que entró en una floristería y , después de un rato , se fue sin comprar nada. No hacia falta. Antonia Brochales,Lupe Sino, fue la única persona que hizo sonreir al mostruo. Así lo dicen las fotos. Manolete solo sonrie cuando está con Lupe Sino.
Un mujer de ese tronio no se merece la película que acabo de no ver en medio del bochorno.
Fernando González Viñas, que publicó el año pasado el mejor trabajo que se conoce sobre el asunto ( " Biografía de un sin vivir " . Ed Almuzara ) da en cubierta la foto a la que me refiero y cuenta una de las grandes anécdotas taurinas para hacerse una idea de lo que estamos hablando. Convoca a José Dámaso Rodríguez, un familiar de Manolete, muerto en el año de 1862:
" Pepete murió corneado por Jocinero un Miura que mató siete caballos, tomó dieciseis varas y corneó a Pepete en el corazón. Aún así, Pepete llegó todavía con fuerza a la enfermería y le dijo al doctor González que le atendía : ¿ Es argo ? ".
Manolete fue un tio , un cabal , un hombre de respeto, un referente moral en una época no precisamente sobrada, un torero; un ser traspasado por la tragedía igual que un coy que se arroja al mar cosido con el cadaver del marinero dentro. Fue un hombre que se puso siempre allí donde se le esperaba. En casa de mi abuelo Julio se guardaba luto cada 28 de agosto. No se oía ni el parte de Radio Nacional de España. Un ser de esta categoría no se merecía la película que acabo de no ver en medio del bochorno.
Manolete se enamoró de Lupe Sino ( Antonia Bronchales Lopecino ,! que importante que una mujer se llame Antonia ! ) y ella de él como es de ley que suceda en estos casos. Debió ser un amor tormentosos y difícil que tiraba de Manuel hacia la vida y le desviaba de su objetivo mas querido que no era otro que morir en la plaza. Encontró su destino una tarde ciega, en Linares, llena de moscas y alboroto. González cuenta que Lupe Sino estuvo en Córdoba para el entierro pero qué como nadie la quería , y no tenía sitio , estuvo vagando de incógnito por las calles y plazas hasta que entró en una floristería y , después de un rato , se fue sin comprar nada. No hacia falta. Antonia Brochales,Lupe Sino, fue la única persona que hizo sonreir al mostruo. Así lo dicen las fotos. Manolete solo sonrie cuando está con Lupe Sino.
Un mujer de ese tronio no se merece la película que acabo de no ver en medio del bochorno.