Diario de un editor

28 mayo 2012

la mirada judia

De siempre me ha interesado el hecho esencial de los diferentes. El vector que hace que algunos resulten a los otros distintos. Cualitativamente distintos. Según Bergier ( Porca Terra ) se trata del lugar desde uno mira. La mirada como eje central de la diferencia. ¿ Desde donde miran los judíos ? me he preguntado muchas veces.
Un fotógrafo americano, Leitier ( La búsqueda de la belleza , se titula la muestra ),  retrata en color , años cincuenta , la ciudad de la gran manzana. Es judío.
 Hay un sentimiento de nostalgia tan poderoso que uno, que no ha estado nunca en New York , parece recordar con fuerza una esquina, un color, la fuerza del agua sobre los paraguas de colores. Un rostro.
El propio autor dice que sus fotografias no son instantes de la realidad sino sombras de un mundo anterior, sin cerrar, incompleto. He aquí el meollo del asunto: la mirada judia nos recuerda un mundo que ya no está y al que pertenecemos. Algo que resuena en nosotros y que nos hace añorar un pasado en el que fuimos otros, quizas dioses.Tiene que haber verdad en la mirada porqué uno ve con sus ojos, y el alma tiembla. Literalmente se pone al borde del colapso. ¿ Que ven los judios ?. Rostros. Esencialmente rostros. El rostro del otro principal argumento contra el homicidio tal y como conocen nuestros compañeros de viaje en el mundo de la animalidad. Rostros de seres de las vidas que no fuimos, o si ,en otros lugares. Rostros del padre o del hermano que se fueron. Gentes con las que pudimos hacer el camino. Levinas ( Etica del Rostro ) que fue un pensador judío que  sabía mucho del asunto. Cito a Levinas y me viene Steiner( Pasión intacta ) y luego Levy( La barbarie con rostro huano ), Grossman ( Vida y Destino ) y luego... La mirada judía siempre me ha cautivado. Ojala pronto vuelvan a lo suyo : mirar por nosotros.

21 mayo 2012

vacas

A la salida de una reunión profesional alguién me invita a dar un paseo. Se trata de una profesora de instituto, muy discreta, un susurro de elegancia en medio del tumulto. Parece dar esa impresión , tan judía, de estar mas cómoda cuanto menos resalte. Va y vine por los naturalistas ingleses, Mhaler, Borjes y sobre todo la jardineria sin un gramos de afectación, como si de una cuestión de buenos ultramarinos se tratase. ¿ Conoces la historia de la vaca ? , me dice. Te la contaré. Lo hace sin afectación. Sabe que cuenta bien y basta. Como Morante.
En un pais lejano el maestro y su discipulo realizan un último viaje para recorrer los sititos que han jalonado la transmisión del conocimiento. LLegan a una casa miserable alejada de una pequeña aldea. Son recibidos por pobres gentes al borde del hambre y la ruina. Fuera hay una vaca grande y lustrosa que pace bajo la atenta vigilancia de los habitantes de la choza: ¿ para que les sirve la vaca ? pregunta el discípulo. Nos da leche, nos alimenta; es lo que tenemos, contestan ellos. Al despedirse el maestro saca un gran cuchillo y deguella a la vaca. ¿ Porque hace esto  pregunta despavorido el alumno?. El maestro calla y siguen el camino.
Cumplido el año y muerto el transmisor el joven discípulo recorre solo los lugares del último viaje. Al llegar a la aldea y en el sitio de la choza se encuentra un palacio. Los habitantes miserables son hoy alegres ciudadanos. ¿ Pero que ha pasado ? pregunta sorprendido. Muerta la vaca dimos en pensar que hacer para seguir viviendo. Tuvimos que imaginar y así sembramos trigo, tomates y .....
Conmovido mis pensamientos se van a la banca financiera, a la prima de riesgo, al dinero , a la garruleria de nuestros políticos capaces de confundir a la profesora con la vaca. Incapaces de distintinguir que ella no es la vaca sino la que cuenta el cuento.
¿ Vamos a consentir que agrdean a  esta gente cultísima , entregada , decente y frágil que cuida de nuestros hijos y nos cuentan los cuentos ? ¿Van a dejar que ofendan a nuestros médicos de familia que cuidan de que el cuerpo nos vaya ofendiendo poco a poco, sin grandes sobresaltos ? . ¿ Vamos a permitir que la libertad siga vínculada al dinero ?
Cuando nos despedimos varios alumnos saludan a la flautista por la calle con un cariño sincero , entrañable. Mínimos ademanes que pone la carne de gallina.
Luce el sol de mayo después de un aguacero. 

09 mayo 2012

Buenas noticias

Día largo cargado de buenas cosas. Ya de noche busco un taxi para llegarme a casa y me doy cuenta que hace una noche de mantequilla, sin duda la mejor del año. Esperando me llega incluso la textura del aire, el verde primoroso del cesped recién regado, el silencio , la luna pasando majestuosa por entre las nubes.
Sin querer casi, se lo digo al taxista y él me cuenta que cuando llega casa con el alba  gusta de tomarse un café oyendo los primeros pájaros. Yo le digo que salgo casi a la misma hora y cruzo por los parques para ver los conejos dentro del corazón de la ciudad que se despierta. El recuerda los tiempos de su niñez en el pueblo y yo le hablo de mis veranos en Cuenca cuando me llevaban a segar a una era cercana. Así hacemos el camino con las ventanillas abiertas dejando entrar la noche en nuestros torpes corazones.
"Estamos necesitados de buenas noticias" me dice al despedirnos alargándome la mano en un gesto desde luego inusual en estas lides.
Todavía doy una vuelta al pequeño jardín de mi parcela.
Tiene razón el hombre. Estamos necesitados de buenas noticias. Deberíamos esforzarnos en reconocerlas y transmitirlas. Hemos podido vivir sin saber lo que era la prima de riesgo pero mucho me temo que no podamos seguir sin el aliento de una noche de primavera, un abrazo a fondo, un verso, un recuerdo. El rumor de la vida. El precio de la muerte.
Yo al menos.

08 mayo 2012

llaves

Voy y vengo por el texto del Quijote como si estuviera en mi casa desde hace muchos años. Recuerdo que siempre fue así. Puedo dejarme mecer simplemente por el son de su prosa, emocionarme con pasajes que conozco casi de memoria, o dejar caer el libro sobre el pecho mientras entro en el pequeño sueño del lector, uno de los mas delicados placeres que conozco. Todos los agostos leo libro y  la vida de Cervantes , ejemplar y heroica tal y como la vió Astrana Marín desde el seminario de Cuenca. Cervantes es para mí alguién de la familia. Alguién tan cercano que mas de una vez pienso en él y se me saltan las lágrimas. Literal.
No me sucede así con otros y he dejando constancia de mi intento. Me cuesta Yoyce, Faulkner, incluso Shakespeare si me salgo de los sonetos. No he podido nunca con Proust. Nunca es decir mas de 100 páginas de esfuerzo baldío y triste.
De pronto, por encanto, traginando con una vieja encuadernación de los premios Gongurt, me he dado de lleno con la obra mas descomunal que pueda soñarse. Estoy en sus páginas deseando no hacer nada más. Sesiones de cuatro y cinco horas. Tardes de domingo enteras como en los viejos tiempos. Estoy pensando en cogerme una excedencia pequeña pero no tengo dinero. Pienso que  nos es posible leer  en el autobus, ni en las salas de espera, ni en le campo. Para leer hay esto hay que haber leido, dejarlo todo y entrar en un viaje de un calado mayor que cualquier oferta de agencia, incluida  Africa. Para leer a Proust  he tenido que esperar paciente y sufrir mucho.
Quizás lo mejor de los libros son los no leidos. Esos que nos están esperando.