Diario de un editor

26 septiembre 2011

resistencia

Hemos sido educados bajo el manto de ciertas construcciones que ahora hay que desmontar para seguir viviendo. El fondo sobre la forma, la creación sobre la construcción; dos ejemplos.
Con la edad , me inclino antes las formas y siento un miedo grande delante de los fondos, sobre todo si llevan aparajedos cualquier aditamento acerca de la verdad y eso. Como mi viejo amigo, el marqués de Quintanar, en cuanto oigo hablar de la verdad saco la escopeta ( él lo decía del medio ambiente, que conste ). Alfonso Quintanar me enseñó mucho de formas y, más, del concepto de formal. Llego a decirme que en su casa no había nada informal y me convenció del todo una noche en la que preguntamos sobre la vestimienta para una invitación en casa de un conocido común.
Sobre la creación y la construcción me remito a los relatos bíblicos que aunque supongo simbólicos me suenan siempre a dibujos animados y a gente desocupada , propensa a la explicación aunque no se la pidas. Me ha intersado siempre mucho más la construcción sobre todos desde que leí a Bergier cuando decía que a Dios siempre se llega con las manos.
La construcción tiene que ver con la resistencia, un concepto poderoso del que no parece ocuparse nadie ultimamente. Yo lo aprendí en Bhohoffer ( no se si lo escribo bien ) y me atrapó hace unos años. La resistencia, tiene que ver con aquel viejo Coronel , Aureliano Buendía, que promovió 32 levantamientos armados y los perdió todos.
Aunque solo sea por esa frase el mundo literario no hubiera podido seguir viviendo sin García Marquéz.

19 septiembre 2011

idolos

El primer ídolo que recuerdo de mi universo deportivo fue el negro Varela. Era el capitán de Uruguay en su victoria de la copa del mundo ante Brasil en el propio Maracaná. Una tragedia nacional como podrán imaginarse. El negro Varela salió aquella noche por la puerta de atrás del hotel y se pasó hasta el amanecer emborrachándose de caña y pidiendo disculpas a los aficionados cariocas por lo que les habían hecho. Varela cobraba el doble que sus compañeros y luego lo repartía. Y eso que no hacía tanto que sacudir a un negro no estaba considerado como falta. Literal.
Tengo noticias directas de que Diestéfano mandaba tanto fuera como dentro y que no era raro verle en el vestuario haciendo colectas para ayudar a algún trabajador del Bernabeú en una desgracia o para avalar una compra imposible para ellos. Tu tanto, tu tanto, decía , según me contó mi padre.
Luego yo ya he visto a Cruif , que fumaba en el vestuario y sacaba hasta los fueras de banda , a Pelé no más que un niño llevado en hombros por sus compañeros, a Maradona subiendo al Napoles hasta el capeonato vieniendo de segunda ( hay que haber estado en Napoles alguna vez para saber que es eso ) y así hasta llegar al Ronaldo gordo que tuvo que llamar a su padre para que durmiera con él ( ortra vez literal ) la noche antes de la final del mundial de Francia. Lo de este Ronaldo , guapo y rico , es mejor no menearlo.
Dicen que los ídolos nos hablan de sus épocas, como las amistades hablan de los hombres. Dios nos ampare. Decía Ratehau en su día:
" Si es dura la época en que vivimos tanto ´más debemos amarla , empaparla de nuestro amor , hasta desplazar la pesadas masas de matería que empañan la luz que brilla del otro lado".
Tengo yo para mí que esta época ni con eso.

05 septiembre 2011

sangre

Por el río de la sangre baja el destino. Borjes lo dijo muy bien en una milonga cuchillera: el destino no hace acuerdos / y naide se lo reproche / ya estoy viendo que esta noche / vienen del sur los recuerdos.
El otro día, en la despedida de un buen amigo antes de su matrimonio, soltaron una vaca para homenajear su pasión torera, su dedicación profesional a tan delicado tema. Víctor Vázquez , profesor de Derecho Constitucional en la Universidad de Sevilla, y presente en el libro de los animales de próxima publicación en esta casa, no se ha puesto nunca delante de un bicho. Solo videos y fotografías de Manolete. Salió adornándose con unos lances al delantal mientras abrían la puerta de la verdad y dejó que la vaca dieran un par de vueltas al pequeño ruedo. Luego citó de muleta, la dió un poco de aire, miró al tendido de los amigos y soltó de la entrañas de su cuerpo cuatro derechazos, tres naturales y par de ayudados por alto de los que se ven pocas veces en una tienta. Tal cual se lo cuento. Para rematar se fue a por el organizador y muy torero cedió los trastos y dijo:
No tiene un pase más el animal. Es toda tuya.
Ahí es na el tío.
Meses atrás en una cena de trabajo ví también a un amigo mío hacer algo parecido. En pleno tratatamiento de quiminio se arrancó por una rumba flamenca que hizo silencio en medio aquella algarabía sin sentido. Había tanto arte en aquel cuerpo maltrecho que una que andaba por allí dijo a la amiga:
Yo saldría todas las noches solo por ver bailar al gachó.
Ya se sabe . La sangre tiene razones que hacen engordar las venas/ pena sobre pena y pena sin que uno pegue el grito...
! Que hubiera sido de nosotros si hubieramos oidos las voces de la sangre antes de empezar a protestar por la presencia del destino !.
Cosas de flamencos.

02 septiembre 2011

Sarah Waters

Todo un mundo el de los lectores. Mi secreto más reciente como lector es el seguimiento de una joven autora galesa a quién encontré por casualidad y de la que no me separo. Sarah Waters (1966 ) publicada en España por Anagrama. Un escritora menor , sin aspavientos, que se encuentra a gusto en los mares inmensos de la época victoriana y el Londres de la segunda guerra. Serena, profesional y dominadora va pasando revista al mundo de los menos favorecidos de la mano de las relaciones lésbicas que también domina en sus profundidades. Es decir, un panorama para aburrir a cualquiera por trillado y fallido tantas veces que sin embargo a mi me tiene enganchado como si de una novia se tratase. Es buena tirando a muy buena esta antigua librera.
A la primera paradoja se acaba de sumar otra no menos sorprente. Al sacar de la biblioteca pública una novela suya que yo no tenía he visto que el libro estaba muy usado. Marcado en su páginas por lectores diferentes. Subrrayado. El libro había pasado por varias manos. Es decir que lo que yo creía privativo, selecto, único, de buen gusto, era público.
¿ Como es posible ? no preguntamos en estas ocasiones.
A mí lo que de verdad me duele no es sentirme descubierto sino no poder contactar con esos otros que participan de uno de mis lugares secretos. No poder saber donde viven, que hacen , cuanto nos parecemos o nos diferenciamos. ¿ Como es posible que el destino no habilite un pasadizo por el que hacer llegar hasta ellos si quiera nuestra propia sorpresa ante el descubrimiento ?
Destapadas las cartas solo me queda recomendarles que lean a Waters. Es posible que encuentren a alguién que en la medida que gobierna su capacidad para contar no hace a nosotros mejores oyentes.
Lo de siempre, vamos.