Diario de un editor

22 marzo 2010

abril

Una de las pruebas de mayor fiabilidad para catar a un hombre estriba en preguntarle por su mes preferido del año. Si le contestan que abril puede entender como segura su madurez, esa forma de estar en la vida por encima de los que digan los periódicos.
Abril es la consumación de la promesa que venía con la luz de enero. En la fragilidad de abril, en los chaparrones de su fragancia, se esconden el azahar de los naranjos y el fulgor de los ojos de la mujer que amaremos para siempre. Tiene el mes los día sin contar y en cada esquina de su geografía está escrito que pue suceder un milagro. Es tiempo de preparar macetas y jardine s domésticos, de sacar del armario cubasqueros de colores y cintas para el pelo. Desde sus horas se va dejando atrás el cabo de Hornos del invierno y se vienen encima como un regalo los arroces con verduras y conejo.
El hombre que conoce estos pequeños trajines del alma que se dan en abril - en primavera como estación de madurez por encima del romanticismo del otoño - es un hombre con el que puede usted hablar de todo.
Las páginas de Plá con respecto a los días de abril y al martini coctel son de lo mejor que he leído. Quedarán por encima de la novelas históricas y de las famosas. Quedarán con la fragilidad de una gota de agua resbalando por la flor de un almedro.
Llega abril, los señores a los nuestro.

15 marzo 2010

Delibes

No he visto citar en estos días un libro muy querido por Delibes, " Mi vida al aire libre ". Daba cuenta en él de sus consecutivas pasiones deportivas, del fútbol al tenis pasando, claro, por la bicicleta, y una conversación muy graciosa con Josep Plá a orillas de una campo de glof en tierras del Ampurdán.
Delibes fué en alguna época casi un forofo del Real Valladolid Deportivo en cuyo campo nuevo la descendencia soltó anoche una paloma blanca, en uno de los gestos con los que han pretendido llenar estos días de dolor y de silencio.
Para algunas personas el deporte - su práctica, su seguimiento, o su celebración - supone un algo de real importancia; una cuestión íntima y de carácter con la que defenderse de las ofensas de la vida. El deporte las va configurando en su biografía y acuden a él como a un oráculo cercano en quién depositar sus pesares y alegrías.
Delibes fue un deportista de raza, un sport-man íntegro y valiente que nunca dió una bola por perdida. Cuando se le acabaron las posibilidades deportivas, se le fué yendo la vida a chorros. Me consta.
Es una lástima que los periódicos del país y del mundo tampoco se hayan enterado del asunto. Son, desde luego, los más turbios del delicado momento que vivimos.

08 marzo 2010

ellos

Alguién me cuenta una historia tan delicada como importante. En la pequeña ciudad acaba de fallecer un prohombre, quizás el último de los que tuve posibilidad de tratar. Fue director de una de las instituciones más prestigiadas del mundo de la historia, padre de familia numerosa, buen paseante y amigo de lo monástico. Cuando enviudó hace ya algunos años, me consta que tanto desde la Trapa como desde Silos se le ofreció la posibilidad de terminar sus días en alguno de lugares que frecuentaba. Prefirió , sin embargo, el retiro en medio del mundo y apenas se le veía por las calles y plazas que tan bien conocía.
En sus ultimos tiempos fue atendido por una pareja sudameriacana que cuidó de él como solo saben hacerlo ellos. A la muerte, por su expreso deseo, la pareja, con sus nombres y apellidos, figuró en la esquela oficial que se publicó en los rancios rotativos locales.
Uno se queda atónito ante tanta elgancia y bondad de ida y vuelta. ! Que no sentiría el maestro por aquellas personas ! ! Que no le habrían hecho sentir aquellas personas al maestro !.
Hemos perdido la oportunidad única de incorporar a ellos en el nosotros. Hemos tenido la posibilidad de hacerlo y la hemos tirado como un anillo al agua.
Pienso en lo que nos espera. En el pecado de orgullo e indolencia vendrá la penitencia.

01 marzo 2010

Más tarta

Visto el éxito de la tarta traigo más noticias de Guille y el descubrimiento del mundo.
Según me cuenta su tía, ayer comió por fuera aparte - donde la madrina - y fué restituido a la casa de su abuela listo para la siesta. Había cocido y al ir a despedirse antes de la cama vió que en la mesa se encontraban alimentos que él dominaba la perfección con su aventurera lengua de trapo, y dijo completamente convencido de su seguridad recién adquirida en la guarderia:
! Guisantes !
Claro, no. Entre risas y aplausos la familia le indicó que no. Que se parecían, pero que no. Que lo que veía eran garbanzos.
El, mantiniendo el tipo como Juncal, volvió a tomar el mando- el hilo del lenguaje- y concluyó:
! Ah, fasantos !. Luego remoloneó un poco y se fue a descansar como los grandes.
Lo ha dicho muy bien LLedó en un artículo de esta semana.
" La vida es pues una energia, un movimiento, que dinamiza todo el " ser " que podemos alcanzar. Dentro de ese proceso hay un destino, una forma de evalucionar, una forma de alzar un ser personal, una individualidad consciente, que fluye en cada historia, desde la luz que haya sabido proyectar sobre las palabras y los conceptos del lenguaje en que ha nacido".
Pues en esas estáGuillermo. Y esta tan emocionante recibir noticias suyas, de su viaje al corazón de las cosas, que ya imaginarán porqué hace años que no me hablo con la actualidad y menos con sus protagonistas. ! Dios nos coja confesados !.